Hasta siempre, mi capitán. Por Javier Campelle

12.08.2014 17:37

   Esta mañana toca una visita extraordinaria a la butaca, pero una visita que hubiera preferido fuera más alegre, si, puede que sea un homenaje, pero también una despedida, anoche, los cinéfilos del mundo nos hemos llevado un mazazo muy grande, se nos ha ido Robin Williams , se ha ido la Señora Doubtfire, el profesor Maguire, Patch Adams, el más curioso Peter Pan que hayamos visto, el locutor Adrian Cronauer con su ¡Gooooooood Moooooorning Vieeeeeeeetnaaaaaaam!,el doctor Sayer de Despertares, y muchísimos personajes que impregnó con su grandísimo talento, pero, en mi caso, me quedo con la descacharrante voz del genio de Aladdin, (probad a verla en Versión Original, y ya me diréis), me quedo con la emoción que me transmitió con su personaje de Parry en El rey Pescador, el papel de Armand en Una jaula de grillos, y por encima de todos, para mí, el profesor que siempre he querido tener, quien, además de enseñar, cambia vidas, el Señor Keating de El club de los poetas muertos, con todas y cada una de las frases que me llegaban al alma, y que, en el momento clave de la película, aun me dan ganas de subirme a la mesa y gritar como sus alumnos que, además de literatura, aprendían a vivir.

    Se nos ha ido alguien que, al igual que haría un buen amigo, nos ha hecho reír, llorar, emocionarnos, con sus arranques, con su sonrisa, a veces triste, pero siempre enternecedora, y, solo puedo decir, emocionado al recordar la escena…Oh, capitán, mi capitán ¡¡¡, hasta siempre…lleva donde vayas el talento que recordaremos siempre.

—————

Volver