
Es el amarillo... ¿el color de la felicidad?
16.07.2016 18:42Patricia Pérez / Foro Deportivo
Parece que no, o al menos no lo es para Roque Mesa, según las últimas informaciones filtradas desde el entorno del jugador y de la propia UD Las Palmas y, cuando parecía que el culebrón del verano había llegado a su fin, nos añaden otro capítulo extra, por cierto, no muy bien recibido por la afición.
La insistencia del propio jugador a vestir la próxima temporada la elástica del club del Nervión y, el posible aumento de seis a ocho millones de euros por la compra, harían posible la incorporación del centrocampista grancanario al club sevillista.
De esta forma, Monchi y Ramírez habrían retomado las negociaciones con la vista puesta en la poco probable, aunque posible entrada del interior derecho argentino, Hernán Toledo, (pretendido en su momento por Real Sociedad y Rubin Kazan) en calidad de cedido al club amarillo. Cabe recordar que, tanto el jugador amarillo, como el propio Toledo y Willian José (jugador descartado para la próxima temporada), pertenecen al mismo grupo inversor que cuenta con los derechos de los tres jugadores.
La salida de Willian José deja una ficha extracomunitaria libre que muy bien podría ser ocupada por el jugador argentino de 20 años que, militó el año pasado en Vélez Sarsfield del que se destaca su fuerte pegada, habilidad en el regate y su polivalencia a la hora de ocupar cualquiera de las dos bandas. El propio Quique Setién declaraba ayer, que “el futuro de Mesa es cuanto menos incierto pero, a día de hoy, el jugador sigue concentrado y ejercitándose con el resto del grupo”, en el sur de la isla.
En los próximos días conoceremos el desenlace de esta historia y, sabremos si finalmente el grancanario cumple uno de sus sueños de militar la próxima temporada en el equipo tricampeón de la Europa League, junto al ex amarillo Vitolo. Si la operación se consuma, el equipo de Pío XII perderá a uno de sus principales pilares en la temporada del ascenso y a un referente indiscutible de la pasada campaña, en definitiva, el club amarillo perderá color con su marcha.
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