El Madrid falla en su noche

Manuel P. Abascal / Foro Deportivo

Villarreal 1 – Real Madrid 0

El Madrid no admite regalos, o eso dio  la impresión después de ver su 1ª mitad en El Madrigal, por demerito suyo y por mérito del rival que sacó sus cartas a relucir desde el primer minuto con un Bruno imperial, con  la velocidad de Bakambu y las continuas buenas elecciones en ataque de Soldado, recuperado para la causa después de su frustrado paso por la Premier League.

Con una presión muy arriba dificultando la salida del balón, anulando el medio campo madridista y haciendo desaparecer en este tramo del partido las figuras de Modric y James, capitales en el desarrollo del juego. En una de esas presiones llegó el primer y único tanto del partido, fallo en cadena de la defensa blanca, con Ramos-Modric y finalmente Keylor Navas como protagonistas desafortunados y con Bruno en la presión, la recuperación y Soldado en la definición. Minuto 9, 1-0,….tocaba remar contracorriente.

Pero el Madrid con su centro del campo desconectado no sólo abusaba de los balones en largo, sino también de la desidia y la pereza, era un equipo obtuso y  predecible con un pobre bagaje ofensivo  parco en ideas; un equipo, un club sin ideas que da la impresión que lo apuesta todo a los goles de Cristiano, más allá de eso, poco o nada más. Un equipo que apuesta por Casemiro para correr detrás del balón en vez de tener juntos a James, Modric, Kroos e Isco para hacer que el equipo contrario corra detrás de ti, lo dice todo. Un dato escalofriante: a estas alturas el Madrid lleva 23 goles menos que el curso pasado.

 En frente, el Villarreal de Marcelino que a diferencia del Madrid de Benítez si tiene un plan, un buen equipo trabajado que cede el protagonismo al colectivo, que sabía lo que hacer en cada tramo del campo con el balón jugando al primer toque siendo muy directos y sin el balón con una presión adelantada o con una presión media, bravo por el submarino amarillo que con muchos menos recursos económicos que el Real Madrid se encuentra sólo a tres puntos en la tabla.

Sin embargo algo pasó en el descanso, porque el Madrid salió con otra energía y con mayor intensidad y en ocho minutos ya había tirado más a puerta que en toda la primera mitad. El juego seguía siendo confuso porque le podía la ansiedad, una ansiedad producto de su indolente primer tiempo y aunque ganó la batalla en el centro del campo le costaba encontrar espacios, aún así dispuso de opciones para empatar pero el Villarreal salió indemne del asedio y se llevó una victoria de valor.

El Madrid debe decidir a través de la autocrítica que es lo que quiere y como quiere conseguirlo, no hay más excusas, no hay más franja de error posible, en una noche para recortar y ganar en autoestima, eligió la indolencia y la falta de actitud como camino para obtener la victoria frente a un buen equipo. El equipo falló en su noche, en la noche para reengancharse, en su noche más oscura.

Foto:castelloninformacion.com