¿Será un grande el Sevilla?

Juan González / Foro Deportivo

DEPORTIVO 2-3 SEVILLA

Y no lo digo porque yo lo crea, puesto que no lo creo como ya he comentado en algunos artículos anteriores.

Pero empieza a asaltarme la duda por el siguiente argumentario:

-          Gana remontando en los minutos finales

-          Cree en si mismo, hasta el punto de no modificar, sustancialmente, su forma de jugar, sea quien sea el adversario.

-          Los rivales, como ayer el Depor, le temen como a un grande, sintiéndose inferiores desde el minuto 1

-          Tiene la suerte de los campeones, el momento del gol de Nzonzi es vital.

-          Hasta el arbitraje, muy esquivo en temporadas anteriores, parece que le respeta en la actual.

Dicho todo lo anterior, el partido para el cuadro hispalense no pudo empezar peor. Con un equipo de circunstancias, en el que faltaban 4 titulares indiscutibles (Ramí, Nasri, Vitolo y Vázquez), los hispalenses salían a Riazor perdiendo 1-0, ya que el buen gol de Ryan Babel se produjo antes de cumplirse el primer minuto de juego. Pérdida de Ganso a 30 metros de su área, buena combinación del Deportivo por la banda derecha, perfecto centro de Juanfran y mejor remate del delantero gallego.

El gol recuerda en parte al recibido en Gijón, por la facilidad y falta de marcaje con la que un delantero remate desde el punto de penalti, teniendo en cuenta que en ambos casos el Sevilla disponía una defensa de 3 centrales.

A raíz del gol el equipo coruñés cree mucho más en lo que tenía planteado su técnico, defensa con repliegue intensivo y contraataques muy muy rápidos y con pocos toques de balón o, lo que viene siendo lo mismo, con envío directo desde la línea defensiva hacia los atacantes, obviando el centro del campo. Por su parte los de Nervión inician su asedio a la portería rival a base de mucho toque de balón, pero con poca profundidad, si exceptuamos las llegadas de Mariano Ferreira por la banda derecha (el mejor de la primera mitad con mucha diferencia) o la genialidad de Ganso para dejar mano a mano a Sarabia con Tyton.

Además de esta última ocasión los sevillistas sólo dispusieron de otra en la cabeza de Nzonzi, que mandó el balón fuera a la izquierda de la portería gallega por centímetros.

Cuando la primera parte agonizaba con el escenario descrito de ataque sin tregua ni profundidad, por parte del equipo andaluz, y defensa numantina por los gallegos, un envío que recoge Andone por la parte derecha, lo resuelve desbordando, él sólo, a los tres centrales y anotando un excelente gol que podía sentenciar el choque. No se produce esta sentencia porque inmediatamente Nzonzi, a pase de Escudero,  con un zurdazo cruzado desde el interior del área, reduce la distancia a la mitad y deja todo abierto para el segundo tiempo.

Sampaoli sustituye a un desacertadísimo Carrizo, dando entrada a Vitolo, hoy por hoy el futbolista más determinante que tiene su equipo, modifica el esquema a un 1-4-1-4-1 y lanza un mensaje de zafarrancho total al ataque, porque a los 5 hombres de ataque hay que sumar los dos laterales que son eminentemente ofensivos.

Con este dibujo el Depor cada vez más temeroso sigue aculándose en el borde de su área y se olvida del todo de atacar. Así la única ocasión en la que los gallegos pisan el área rival es en la contra en la que Andone es derribado por Mercado cuando se disponía a chutar con la pierna izquierda.

Al igual que Sampaoli manda un mensaje de ataque a ultranza con su cambio, Garitano hace justo lo contrario y sustituye a Colak (centrocampista ofensivo) por Celso Borges (Pivote defensivo) y posteriormente a Juanfran por Arribas. A partir de aquí el asedio es total, no hay claras ocasiones, pero hay mucho balón en el área, muchos lanzamientos de esquina y una posesión de balón infinita para el Sevilla, siempre muy cerca del área gallega.

Fruto de este dominio y en uno de los innumerables rebotes dentro del área deportivista, el balón llega a Vitolo que consigue batir a Tyton. El Sevilla no se conforma (otro síntoma de grande) e intenta lograr la victoria, a la cual llega mediante un remate en un córner, al cual responde Tyton con una buena parada, pero el balón llega muy franco para Mercado que lo hunde en la red.

Victoria y tres puntos muy importantes para que este equipo siga en el objetivo marcado al inicio de la temporada, tres puntos logrados justamente, aunque el Depor hiciera un buen partido, renunció demasiado pronto al ataque y a la posesión del balón, lo que le llevó a una derrota muy dolorosa por el momento en el que se produjo.

Con los deberes del fin de semana terminados, ahora toca trabajar para los retos de la próxima, que son complicadísimos, primero en Europa, ante el campeón italiano, con la necesidad de lograr al menos un punto, que asegure matemáticamente el pase a la siguiente fase, sin tener que jugárselo a vida o muerte la siguiente jornada en Francia y, en la competición doméstica ante un Valencia, que está por debajo de lo esperado, pero que es un equipo con un potencial muy parejo al sevillista.

¿Podrá el Sevilla seguir pareciendo un grande?