España, brillante campeona de Europa sub 19 (2-0)

Víctor Díaz / Foro Deportivo

ESPAÑA 2-RUSIA 0

La selección española sub 19 ha conseguido esta noche el séptimo Europeo sub 19 para el palmarés de nuestro fútbol, al derrotar en un gran partido a Rusia en la gran final del campeonato que se ha disputado durante estos días en Grecia. España no conseguía el título desde 2012 pero, yendo de menos a más en el presente torneo, se ha ganado suceder en el palmarés a Alemania, vencedora en 2014.

Rusia era un rival sumamente peligroso; no en vano en la primera fase había conseguido derrotar a España por un claro 1-3, aprovechando su gran poder al contraataque. Pero hoy los chicos de Luis de la Fuente han tomado buena nota, y no han dejado opción alguna a su adversario. 

Los goles de Borja Mayoral y Nahuel Leiva no han hecho sino certificar el mejor fútbol desplegado por España, al ritmo que marcaban Dani Ceballos y Marco Asensio. Con el primero cada vez hay menos dudas de que el Betis tiene un pedazo de futbolista en sus filas, cuya renovación se está retrasando mucho más de lo deseado y de lo deseable para el club verdiblanco.

Enorme Ceballos

La clase magistral de fútbol artístico y efectivo que el utrerano ha impartido en el medio campo generó una notable cantidad de ocasiones desbaratadas bien por los palos, bien por el portero Mitryushkin. Y también por el trío arbitral, que no vio cómo al cuarto de hora el meta ruso sacaba desde dentro de la portería un doble remate del central del Sporting de Gijón Meré.

Un error del árbitro principal pero, sobre todo, de su asistente que, sin embargo, no desmoralizó a una España que, a los 39 minutos, encontró el justo premio a su evidente superioridad. Asensio entró en escena, al recibir un balón del racinguista San Emeterio -servido previamente por Ceballos- y lanzar un perfecto disparo que Mitryushkin desvió al larguero. Por fortuna, el "killer" Mayoral estaba con la caña preparada para cabecear el rechazo al fondo de las mallas y adelantar, por fin, a nuestros sub 19 (1-0).

La segunda parte fue menos brillante que la primera pero, a cambio, nos mostró la faceta sobria de un equipo que ha ido madurando a medida que avanzaban los partidos. Rusia decidió intentar dar un paso adelante, no le quedaba otra; pero España se defendió perfectamente, hasta el punto de prácticamente no conceder ocasiones a su rival.

Asensio, motor ofensivo

Y en ataque, todo quedó en los pies de Asensio, un jugador por el que media Primera División se pelea por su cesión en caso de que Rafa Benítez no estime oportuno quedarse con él para el Madrid. El ex mallorquinista se mostró, sencillamente, imparable, sentenciando el partido con el extraordinario pase que Nahuel aprovechó para hacer el 2-0.

Mano a mano con Mitryushkin, el hispanoargentino del Villarreal cruzó perfectamente el balón fuera del alcance del portero ruso, a contrapie (2-0), acabando así con cualquier posibilidad de incertidumbre de cara a conocerse el dueño del trofeo que levantó minutos más tarde el capitán, el zaragocista Vallejo.

Era el minuto 78 y Rusia, mal que le pesara, se rindió. España pudo incluso hacer algún gol más, pero todo se quedó así. Después de tantos sinsabores a lo largo del último año por el fracaso tanto de la absoluta en el Mundial como de la sub 21 al no entrar ni en el Europeo ni en los Juegos Olímpicos, este triunfo abre nuevas expectativas para el futuro del balompié nacional. Dicho esto, naturalmente, con toda la prudencia que da llevar ya una buena cantidad de años observando y disfrutando de este deporte que, cuando se practica bien, con diferencia es el más bello de todos.